Alcanzar la felicidad es un anhelo inherente al ser humano y eso incluye a las personas que viven con una enfermedad crónica. Según diversos estudios clínicos, los productos derivados de cannabis para uso medicinal pueden ayudar, independientemente del efecto sobre el síntoma principal.
Todos queremos ser felices, tener vidas plenas y satisfactorias, pero el día a día nos somete a una constante presión, lo que muchas veces deriva en trastornos que nos afectan sustancialmente, como el estrés, la ansiedad o la depresión. Imaginemos agregar a ello una dolencia crónica que impida la realización de nuestras actividades diarias debido a síntomas como dolor, fatiga y/o insomnio.
En esa búsqueda por alcanzar ese estado de equilibrio emocional y físico que llamamos felicidad, la ciencia revela que esta se puede materializar cumpliendo nuestras metas y haciendo las cosas que nos hacen sentir realizados. Sin embargo, es interesante conocer cómo el sistema endocannabinoide (SEC) tiene un rol fundamental en la regulación del equilibrio de múltiples sistemas fisiológicos de nuestro cuerpo que impactan sobre nuestra felicidad.
¿Qué es el sistema endocannabinoide? Aquel que se encarga de la comunicación intercelular que gestiona los procesos metabólicos y fisiológicos, como nuestra respuesta al dolor, el apetito, la digestión, el sueño, el humor, los procesos inflamatorios y la memoria. También se encarga de mantener la homeostasis, es decir, las funciones que garantizan la estabilidad y el equilibrio del organismo, jugando así un rol esencial en el estado de ánimo [1].
El SEC está compuesto por tres componentes: receptores cannabinoides ubicados en diversas células, como los receptores CB1, alojados principalmente en el sistema nervioso, y los receptores CB2, vinculados principalmente al sistema inmunológico. También están los endocannabinoides como anandamida y 2-AG que son las moléculas efectoras de estos receptores y las enzimas metabólicas, como FAAH, que degradan o regulan estos componentes.
Los fitocannabinoides, como THC y CBD, también tienen efecto sobre los receptores cannabinoides del SEC. De esta forma el SEC establece una conexión con los cannabinoides presentes en la planta de cannabis sativa, como son el Cannabidiol (CBD) y el Tetrahidrocannabinol (THC), cuyos beneficios empiezan a ser reconocidos en el ámbito de la salud [2].
¿Y cómo se relaciona, de manera más detallada, el SEC con los fitocannabinoides presentes en el cannabis para uso medicinal y la calidad de vida muchas veces descrita por los pacientes como sinónimo de su bienestar o felicidad?
El camino bioquímico hacia la felicidad
El sistema endocannabinoide tiene como componente muy importante a un neurotransmisor que influye en nuestro estado de ánimo y que lleva el nombre de anandamida. Conocida también como la “molécula de la felicidad”, la anandamida ayuda a regular el dolor, el estrés y la ansiedad. No obstante, esta sustancia se degrada rápidamente, por lo que sus efectos son breves y típicamente a demanda.
Es decir, el cuerpo humano lo sintetiza únicamente cuando lo necesita. Es de esperar, que en algunas personas, el sistema endocannabinoide no funciona como debería y se habla de un grupo de personas que tendrían un tono reducido del sistema que se podrían beneficiar con el uso de fitocannabinoides.
Un estudio médico realizado en 2015, y cuyos resultados fueron confirmados por una investigación posterior publicada el año 2019, exponen cómo el CBD inhibe las enzimas encargadas de descomponer la anandamida del organismo, lo que incrementa la duración y cantidad presente de anandamida en el cuerpo, y se podría inferir que aumenta sus consiguientes efectos descritos sobre la sensación de felicidad y bienestar [3].
Además, otro estudio pre-clínico mostró que por medio de la liberación de anandamida, regulada por la molécula oxitocina, controla los sistema de recompensa social promoviendo la interacción social y comportamiento social positivo. [4]. Sin embargo, debemos agregar que dichos estudios son pre-clínicos y requieren confirmación en estudios clínicos per se para poder tener afirmaciones concluyentes.
Ofrecer bienestar y relajación
El CBD también puede jugar un rol en la regulación y liberación de otros neurotransmisores, como por ejemplo GABA, los cuales tienen un papel esencial en el comportamiento, los procesos cognitivos, así como la respuesta del organismo frente a la ansiedad, el estrés y el miedo.
De acuerdo con un estudio pre-clínico realizado por investigadores de la Universidad de Sidney (Australia), el CBD, en su interrelación con los receptores GABAA, regula la excitabilidad cerebral, proporcionando una sensación de calma y relajación cuando las neuronas se sobreexcitan lo que podría explicar su actividad antiepiléptica y ansiolítica[5].
Asimismo, un estudio pre-clínico realizado en el 2019, mostró que el CBD interactúa con los receptores de serotonina, que contribuye con la regulación del estado de ánimo y la sensación de felicidad. Y, al estimular su activación, generó efectos ansiolíticos. Estos estudios muestran los mecanismos de acción que deben ser comprobados en estudios clínicos posteriores de personas con síndromes de ansiedad y depresión(6).
Gozo y salud
Es importante acotar que, si bien el CBD puede influir en nuestra sensación de felicidad y bienestar al interactuar con el sistema endocannabinoide, esto no quiere decir que su uso se debe extender como suplemento nutricional o profiláctico.
Más bien, sus efectos terapéuticos se han observado en diversos estudios clínicos principalmente en la mejora de la calidad de vida para quienes padecen trastornos físicos o mentales. Es por ello que, en todos los contextos, debe ser un profesional de la salud el que determine la necesidad y la forma de utilizar cannabis de uso medicinal para proveer salud y felicidad a las personas.
REFERENCIAS
[1] Involvement of the endocannabinoid system in reward processing in the human brain.
Psychopharmacology. 2011.
[2] The biochemistry of the endocannabinoid system. 2020.
[3] Cannabinoid Regulation of Fear and Anxiety: an Update. Current psychiatry reports. 2019.
[4] Endocannabinoid signaling mediates oxytocin-driven social reward. National Academy of Sciences. 2015.
[5 ] The direct actions of cannabidiol and 2-arachidonoyl glycerol at GABA A receptors. Società italiana di farmacología. 2017.
[6] Cannabidiol modulates serotonergic transmission and reverses both allodynia and anxiety-like behavior in a model of neuropathic pain. International Association for the Study of Pain. 2018.
